Sergio Berrocal | Maqueta Sergio Berrocal Jr Los vuelos en primera son menos dolorosos. Por lo menos las primeras de entonces, cuando Luis se metió en un avión de Air France al que había llegado desde otros aeropuertos, otros
Sergio Berrocal | Sergio Berrocal Jr Cuando hace un montón de años, estuve horas conversando en español en la cubierta de su goleta anclada en el puerto de Tánger con la que luego sería su viuda, Patricia Wymore, Errol
Sergio Berrocal | Maqueta Sergio Berrocal Jr Pasado glorioso, y no tan lejano en el que las mujeres, algunas no todas, llegaron a dominar ese mundo de machos que siempre ha existido.Desde la actriz del tercer acto del vodevil
Sergio Berrocal | Maqueta Sergio Berrocal Jr Volar desde Brasilia, la capital de un futuro que no ha existido nunca pese a que Oscar Niemeyer pretendiese haberla construido en una sabana donde no había más que culebras hambrientas, hasta Montevideo,
Sergio Berrocal | Maqueta Sergio Berrocal Jr Maldita sea, vosotros, los listillos del barrio, los psiquiatras a los que Freud habría mandado a las galeras, quieren que dejemos la nostalgia, que nos positivemos, que aceptemos todos los horrores de estos
Sergio Berrocal | Maqueta Sergio Berrocal Jr. Juro que ningún malévolo sultán, que hoy sería un banquero, porque los señores inmensamente ricos de las babuchas y de los turbantes se extinguieron con nuestros cuentos infantiles, me ha obligado a contar
Sergio Berrocal | Maqueta Sergio Berrocal Jr El cine puede ser tan mágico por dentro como en esa pantalla que es la única puerta de entrada del espectador.Entre bambalinas, el medio cinematográfico está hecho de talento, de mediocridad, de enormes