José Dos Santos | Maqueta Sergio Berrocal Jr. Datos publicados la víspera por las autoridades sanitarias cubanas avalan el título de esta nota, aunque por razones obvias por su extensión no hayan sido expuestos en el riguroso, pero sintético, reporte
Sergio Berrocal | Maqueta Sergio Berrocal Jr. En 1956 le otorgaban el Nobel de Literatura a Juan Ramón Jiménez, uno de los más maravillosos poetas del mundo, español casi olvidado por sus propios compatriotas, que sólo tienen ojos para poetas
Rafael lam | Maqueta Sergio Berrocal Jr. “El jazz no nace en 1900 en la Nueva Orleans, como lo pretende una leyenda tenaz —dice Deborah Morgan—, es el resultado de la confrontación de tres siglos con la participación de muchos
Sergio Berrocal | Maqueta Sergio Berrocal Jr. Algunas mujeres no son únicamente frígidas sino refrigerantes, neveras, refrigeradores vivos y ambulantes. Marcel Jouhandeau, “Souffrir et être méprisé”Cada día me parece que los hombres se han olvidado de ser tios. Seguramente es
Manuel Juan Somoza | Maqueta Sergio Berrocal Jr. La Habana A las 09:10 horas eran los últimos de la larga fila de más de 200 personas en busca de los productos que racionados se vendían en aquel comercio estatal bajo
Sergio Berrocal | Maqueta Sergio Berrocal Jr. No he conocido a ningún hombre de mi generación, la buena, aquella de los años sesenta del siglo XX, cuando los chinos tenían otras cosas que hacer que enviarnos epidemias mortíferas y cuando
Sergio Berrocal | Maqueta Sergio Berrocal Jr ¿Cuántas veces se enamora uno o una en la vida? Yo me he enamorado muchas veces, y muchas veces me han devuelto al toril porque no estaba preparado, porque era muy joven y
Sergio Berrocal | Maqueta Sergio Berrocal Jr. Encerrados en nuestras viviendas, a veces asomados a las terrazas como haciendo novillos, los mayores de esta isla africana mía (los viejos, vamos) tratamos de torear al coronavirus, bicho procedente de China, que
Sergio Berrocal | Maqueta Sergio Berrocal Jr Los astros mundiales del fútbol también tienen su alma y sus carteras, porque tienen varias. Es incluso posible que piensen en la eternidad, que vayan a misa el que quiera y el que
Sergio Berrocal Jr | Maqueta Sergio Berrocal Jr En la noche del 31 de marzo de 1964 el general Mourão Filho realizo una llamada a las armas que marcó el comienzo de una dictadura militar en un desconocido país
Sergio Berrocal | Maqueta Sergio Berrocal Jr. Emborrachadas de viento de levante, las olas aplastan la arena como la vida y la muerte exacerban el entendimiento en un Mar adentro que no es el que se extiende allende la playa
Sergio Berrocal | Maqueta Sergio Berrocal Jr. Son las dos y pico de la mañana en La Habana. La caza de alimentos en colas y más colas donde ronda el coronavirus ha terminado por hoy. Pero ya hay que preparar
Sergio Berrocal | Maqueta Sergio Berrocal Jr Era yo muy pequeñito cuando me enseñaron a ser agradecido en la vida. Luego por mi cuenta agregué, sin decírselo a mi padre el Coronel, que lo sería solo con la gente que
Sergio Berrocal | Maqueta Sergio Berrocal Jr. Soy periodista, es decir que me he pasado la vida contando cosas agradables y desagradables, y hora, a mis ochenta años de edad, procuro seguir relatando mil cosas que se quedaron en el
Manuel Juan Somoza | Maqueta Sergio Berrocal Jr. La Habana La presunta conspiración china la quieren poner de moda algunos políticos de occidente, los medios que le hacen el juego y hasta los que afirman no tener “oídos ideológicos”. Las
Me gustan los hombres que dan sin necesidad de pedirles nada… “Nana”, Emile Zola Sergio Berrocal | Maqueta Sergio Berrocal Jr. Con los brazos lechosos en actitud furibunda, de una belleza casi virginal que miles de años después pondría
Sergio Berrocal | Maqueta Sergio Berrocal Jr. Hacía una eternidad que no nos veíamos, que no nos hablábamos, que no nos cruzábamos en un festival de cine, en un aeropuerto, en cualquier sitio. Gabriel Retes, que acaba de fallecer a
Marcelo Aparicio | Maqueta Sergio Berrocal Jr. Era principio de primavera. La isla ya se veía emperifollada con los primeros almendros florecidos. El aire, finalmente, circulaba tibio, después de haber soportado sus habitantes los rigores del frìo y, lo peor,
Sergio Berrocal | Nota Sergio Berrocal Jr. Cuando se pegó el tiro más célebre de toda la historia del suicidio mundial, el escritor norteamericano Ernest Hemingway ignoraba que ese disparo iba a costarle perderse la guerra que él nunca había
José Dos Santos | Maqueta Sergio Berrocal Jr. En mi caso particular, como el de muchos cubanos que dependen de otros para su cotidianidad, vivo en callada zozobra los momentos en que mi esposa enfrenta el complejo -y a veces